San Luis Potosí, SLP.- La Dra. Aída Ortega Velázquez presentó el libro “Nuevos retos de las organizaciones encargadas de la salud en México”, un trabajo en conjunto con diversos profesionales.
En su exposición, detalló que la salud en el país es un bien y un derecho, los cambios demográficos, económicos y políticos, son grandes que en tan pocos años el sistema requerirá de una redefinición. “La salud es una condición igualadora en la que todas las ideologías coinciden y en la que se dejan atrás preferencias personales, salud es dentro de sus múltiples definiciones bienestar”.
Indicó que las expectativas de vida en menos de un siglo se han duplicado, con ello los recursos para un país como México que tenga una cobertura tan completa si bien no universal, pero si incomparablemente mejor que hace décadas, representa una aplicación del porcentaje económico del Producto Interno Bruto (PIB) importante.
“está además un factor de una población tan dispersa geográfica y en localización dentro de la pirámide poblacional, una nación con niños y jóvenes, una población adulta creciendo y una tasa de natalidad elevada. Hay que encontrar factores que ayuden no solo a prestar un servicio sino incrementar la calidad de atención algo que se ha trabajado en los últimos años en las instancias de salud del estado”.
Manifestó que la calidad es un concepto complejo donde se involucran factores socioeconómicos, científicos, académicos, así como atención, educación, disponibilidad, “pensar en calidad basado solo en los resultados médico científicos es una visión obtusa del concepto real de calidad en la atención, como ya se ha dicho calidad es una noción integradora, un deseo traducido en eficacia”.
Puntualizó que el paciente no solo requiere de una atención adecuada sino un trato digno y el ofrecimiento de los altos estándares posibles en las condiciones en las que se otorga el servicio, “la salud es un engranaje que debe comprender una diversidad de actores, desde el más humilde integrante hasta el más encumbrado en la pirámide debe realizar su trabajo con eficacia para transmitir un servicio de calidad”.
Con los años las comunidades han cambiado, los jóvenes llamados del milenio quizá no comprendan una sociedad sin internet, sin computadoras y telefonía inteligente, pero existió y la información de las epidemias, contagios y reacciones adversas era tan tardía que había grandes mortandades que hoy en día se han combatido y modificado favorablemente.
Añadió que avanzó la atención médica, gracias a los avances tecnológicos y científicos de las áreas de la salud, pero también a las comunicaciones y estadísticas que orientan a tomar acciones con mayor premura y precisión. “Las mencionadas redes de atención favorecen la difusión de los conocimientos y sus acciones, hacen posible la optimización de recursos materiales e incluso humanos”.
El libro toca otros tópicos de atención integral al involucrarse en la salud mental que en otros tiempos era un tabú. Hace una revisión general de la situación, incluye el tema de adicciones y el gran valor que tiene de implicar al usuario de los servicios en la toma de decisiones